INTRODUCCIÓN
Según la Constitución de la República del
Ecuador (2008) en su Art 163” la Policía Nacional
del Ecuador es la entidad encargada de brindar
seguridad pública a todos sus habitantes,
cumpliendo y haciendo cumplir las leyes,
garantizando así la seguridad ciudadana y
convivencia social pacífica, la democracia y la
participación en el marco del respeto a los
derechos fundamentales, con una visión integral
que sitúa al ser humano en su diversidad, como
sujeto central para alcanzar el Buen Vivir. (p.35)
En función de lo planteado los agentes del
orden deben poseer una excelente preparación
física que les permita realizar sus funciones con
el mayor profesionalismo posible.
Cabe resaltar que esta profesión requiere
enfrentar situaciones de una alta demanda tanto
física como mental, por lo que mantener un estado
físico óptimo les ayuda a garantizar la seguridad
personal y la efectividad en los procedimientos
policiales.
Dentro de este marco varios expertos en el
campo de la seguridad pública señalan la
necesidad de un entrenamiento físico adecuado
para mantener una buena condición física,
conjuntamente con una buena alimentación y
salud mental, lo cual les permitirá enfrentar los
desafíos diarios con mayor eficacia y así reducir
el riesgo de lesiones.
Según un estudio realizado por un grupo de
investigadores Herrick, et al., (2016) para la
evaluación de la condición física entre las
agencias de aplicación de la ley en los Estados
Unidos, se determinó la necesidad de una
preparación física adecuada y un programa de
evaluación regular para garantizar que los policías
estén físicamente aptos para enfrentar las
demandas de su trabajo.
Al revisar la literatura especializada en este
tema encontramos que Lockie, et al. (2020)
indicó que un programa de ejercicios de fuerza y
acondicionamiento mejora la relación del
rendimiento y la aptitud física, así como la
resistencia lo cual disminuye la aparición de
lesiones en oficiales de la policía. Mejorando la
aptitud y preparación física tan importante en los
agentes del orden.
Con respecto a las demandas físicas del
trabajo, los oficiales de policía también están
expuestos a realizar tareas físicas extenuantes,
como correr, perseguir a los sospechosos y
someter a los delincuentes. Sin dudas una
variedad de factores estresantes, como violencia
y trabajo por turnos.
Dicho con palabras de Marins et al., (2019)
estar en buenas condiciones físicas puede ayudar
a los oficiales a hacer frente a estos factores
estresantes y a mantener su salud mental. En
general, estar en buenas condiciones físicas es
esencial para que los agentes de la policía realicen
su trabajo de manera segura y eficaz.
El trabajo físico no es lo único importante en
la preparación de los policías, también requieren
de una capacidad óptima para recuperarse de
dicha actividad física, el rendimiento aeróbico es
fundamental, ya que muchas de sus tareas
requieren resistencia cardiovascular y una
capacidad de trabajo prolongada sin fatiga
extrema.
Según Smith, et al., (2015), la capacidad
aeróbica de los policías está directamente
relacionada con su capacidad para responder
rápidamente a situaciones de emergencia y
mantener un nivel de energía sostenido durante
largos períodos de tiempo.
La resistencia cardiovascular adecuada es
esencial para perseguir a sospechosos a pie,
participar en operativos de búsqueda y rescate y
realizar patrullas extensas sin fatiga excesiva.
Con base en un estudio realizado por Jones, et
al., (2017), se destacó, que el rendimiento
aeróbico deficiente en los policías se relaciona
con un mayor riesgo de lesiones en el trabajo.
La falta de resistencia cardiovascular puede
afectar negativamente la capacidad de los agentes
para realizar acciones físicas exigentes de manera
segura y eficiente, lo que aumenta las
posibilidades de errores y accidentes durante las
intervenciones que la sociedad exige.
Por lo tanto, es esencial implementar
programas de entrenamiento físico que incluyan
actividades cardiovasculares y de resistencia.
Citando a Brown,. et al. (2019), estos programas
deben ser diseñados específicamente para las
demandas físicas de la labor policial, con el
objetivo de mejorar el rendimiento aeróbico,
reducir el riesgo de lesiones y promover la salud
general de los agentes.
Para poder valorar el rendimiento aeróbico y
la condición física de los policías existe una
herramienta útil llamada Test de Cooper.
Desde la posición de Reascos (2021), el Test
Revista INNDEV ISSN 2773-7640. Mayo- Agosto 2023 Vol 2, Núm 3, pp 28-35 Recibido (Received): 2023/06/02